Venezuela intensifica medidas de seguridad en medio de crecientes tensiones con Washington y un escenario geopolítico cada vez más inestable.

En el corazón de Caracas, Venezuela, se desarrolló un ejercicio militar este sábado que busca preparar a los civiles para una eventual agresión externa. En Petare, uno de los barrios más densamente poblados de la ciudad, residentes recibieron instrucción básica en armamento, primeros auxilios y tácticas de camuflaje como parte del «Método Táctico de Resistencia Revolucionaria». Esta iniciativa, que incluyó el despliegue de 25 blindados en la capital y talleres en otras ciudades como San Cristóbal y Barinas, buscaba capacitar a miles de personas para una posible defensa.

El objetivo principal del ejercicio era instruir a los civiles en técnicas básicas de auto-defensa, primeros auxilios y estrategias de supervivencia. En Petare, aproximadamente cien personas asistieron al taller, donde aprendieron a utilizar armas de fuego, a aplicar vendajes y a desenvolver habilidades de combate cuerpo a cuerpo.

Sin embargo, la respuesta fue más baja de lo esperado. Aunque miles de venezolanos se habían ofrecido voluntariamente para participar en el ejercicio, solo una pequeña fracción de ellos asistió al taller. La convocatoria realizada por Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, había atraído la atención de muchos ciudadanos dispuestos a defender su país.

A pesar de que la asistencia no fue tan alta como se esperaba, los organizadores consideraron el ejercicio un éxito en términos de capacidad y conocimiento transferido. «La idea es que los civiles tengan las herramientas necesarias para defenderse si fuera necesario», dijo un oficial militar entrevistado por este periódico.

El gobierno venezolano ha justificado la necesidad de esta capacitación argumentando que Estados Unidos y otros países han realizado ejercicios militares en la región, lo que puede representar una amenaza a la seguridad nacional. Sin embargo, críticos han cuestionado la motivación detrás de este ejercicio, sugiriendo que se trata de un intento para movilizar a los seguidores del gobierno y justificar el aumento del gasto militar.

En cualquier caso, el ejercicio ha generado una gran cantidad de debate en Venezuela. Mientras algunos ven esta capacitación como una medida necesaria para proteger la seguridad nacional, otros han expresado preocupaciones sobre la escalada de la violencia y el papel que juega el gobierno en este proceso.

La disputa se refiere a la naturaleza del régimen de Maduro y su capacidad para defender el país. Aunque ha habido críticas hacia su liderazgo y la gestión económica, muchos venezolanos siguen apoyando al presidente y consideran que es necesario proteger el país de posibles agresiones externas.

En un momento en que Venezuela enfrenta múltiples desafíos, incluyendo una crisis económica y una crisis política, este ejercicio militar ha generado más preguntas que respuestas. ¿Qué es lo que realmente está pasando detrás de esta capacitación? ¿Está el gobierno verdaderamente preocupado por la seguridad nacional o hay algo más detrás de esta maniobra? Solo el tiempo dirá.